Siguiendo
en la línea de los largometrajes de época, lo que acaba de hacer el diputado
Presidente Juan Gerardo Guaidó al salir hacia Colombia, es digno del título que
antecede, un año después del atentado del grupo terrorista “Ejercito para la
Liberación Nacional” (ELN), ocurrido en a la Escuela de Policía General
Santander, el cual dejó 22 cadetes muertos; dicha escuela constituyó el
escenario de la tercera Conferencia Ministerial Hemisférica de Lucha contra el
Terrorismo y Guaidó estuvo allí, como Presidente de Venezuela, nada más y nada
menos.
El líder de
la oposición venezolana, salió el domingo a Bogotá, Colombia, sin avisar ni
decir nada, carajo parece que al fin entendieron que al régimen se le tiene que
jugar rápido y en silencio, así debe ser; cabe destacar que Guaidó fue recibido
con honores de jefe de Estado en la Casa de Nariño, en el encuentro también
estuvieron presentes la vicepresidenta Marta Lucía Ramírez, la canciller
Claudia Blum, y la Jefe de Gabinete, María Paula Correa.
Luego de la
salida de Venezuela, los reportes de prensa indicaron que podría ser el
inicio de una gira internacional que sin lugar a dudas traerá mucho de qué
hablar, eso esperamos.
El golpe al
hígado y de frente para el régimen Chavista de Nicolás Maduro, ha sido la
reunión cara a cara de Guaidó y el Secretario de Estado Norteamericano Mike
Pompeo; tal ha sido la situación que generó reacciones inmediatas en el
oficialismo liderado por Nicolás Maduro, quien arremetió contra el funcionario
de Washington que participa en la Cumbre Hemisférica contra el Terrorismo que
se celebrada en la ciudad de Bogotá, en Colombia, si no hubiera sido importante
ni lo hubieran mencionado.
Como era de
esperarse, Maduro repudió la reunión y los señalamientos de Pompeo a quien
acusó de viajar a Colombia para apoyar las masacres y causar el hambre en
Venezuela, el mismo cuento de siempre, nada nuevo.
No todo es
color de rosas como muchos piensan, ya que el funcionario norteamericano en la
reunión sostenida le exigió a Guaidó poner fin a la tiranía de Maduro, mensaje
enviado directamente por el Presidente Trump; por lo tanto no estamos muy
errados en nuestros análisis anteriores, apoyamos sin restricciones todas las
labores de quienes trabajan en pro de devolver la democracia a nuestro
país, pero hay que pasar de las palabras
a la acción, es una exigencia de millones quienes sufren a diario.
«El mundo
debe continuar apoyando los esfuerzos del pueblo venezolano para restaurar su
democracia y poner fin a la tiranía de Maduro, que daña a millones de
venezolanos y tiene un impacto en Colombia y, de hecho, en toda la región»,
dijo Pompeo, hablando en Bogotá, más claro imposible.
Mientras
escribimos esta columna, la gira de Guaidó continúa, en pleno desafío contra la
dictadura criminal Chavista, el recorrido lo llevará por Europa, irá a Londres
Inglaterra, donde de acuerdo a la agenda oficial del Diputado se reunirá con el
canciller británico Dominic Raab en la oficina de la Secretaría de Relaciones
Exteriores, allí se espera que toque el tema de la crisis política y
humanitaria que enfrenta el pueblo venezolano, una de las prioridades de esta
gira.
Tras su
paso por Inglaterra se espera que Guaidó visite el parlamento de la Unión
Europea donde se estaría reuniendo con el líder de la diplomacia Josep Borrell,
para luego participar en Davos, Suiza, en el Foro Económico Mundial, según
confirmó la oficina de prensa del foro: “Juan Guaidó, presidente de la Asamblea
Nacional de Venezuela y miembro de la comunidad de Jóvenes Líderes Globales,
asistirá a la Reunión Anual 2020 del Foro Económico Mundial en Davos”, allí
“hablará sobre la situación económica, política y social de Venezuela y su
camino hacia la recuperación”.
Muy
importante para todos es el hecho de que se espera que los presidentes de
Estados Unidos, Donald Trump y de Rusia, Vladimir Putin, asistan al encuentro
económico, ¿habrá algún encuentro entre Guaidó y Trump?, con toda seguridad y
como el culillo es libre, en Miraflores estarán con rollos extra de papel
higiénico.
Por lo
pronto todo está en pleno desarrollo, muchos haciendo planes, otros calculando
las circunstancias y así como Steve McQueen cuyo nombre en la película es
Virgil Hilts, más de uno regresará al punto de origen, con el mismo guante y la
misma pelota, así de simple y sencillo.
Reinaldo J. Aguilera R. @raguilera68
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