“México Lindo y Querido”



“Voz de la guitarra mía, al despertar la mañana, quiere cantar su alegría, a mí tierra Mexicana…”; así inicia la hermosa canción popularizada por el gran Jorge Negrete.
Siempre en todo México han existido experiencias de gobierno de políticos de diferentes tendencias, por ejemplo del Partido Acción Nacional (PAN), que es un partido político laico, considerado afín a las ideas liberales y que según sus estatutos su posición ideológica es el llamado humanismo político, por otra parte existe el  Partido de la Revolución Democrática (PRD), de ideología política de izquierda y desde luego el  Partido Revolucionario Institucional (PRI), que es un partido con tendencia centro derechista el cual mantuvo el poder político de manera hegemónica entre los años 1929 y 1989.
Cabe destacar que en el transcurso de muchos años se han visto casos  gravísimos de corrupción en territorio mexicano, muchos de ellos de dimensiones impensables en esa bella “Tierra Mexicana”, como ha quedado ya probado en el caso de algunos ex gobernadores y alcaldes. Es por esta razón que la sociedad en general repudia a los partidos políticos y busca, a través del procedimiento del ensayo y el error, otros caminos que le permitan lograr mejores gobiernos.
Es así como se vio materializado lo ocurrido el domingo pasado, donde el candidato Andrés Manuel López Obrador (AMLO), quien ya llevaba varios meses sosteniéndose en el primer lugar de las principales encuestas del país, obtuvo el triunfo en las elecciones generales celebradas en el país azteca.
Tras 18 años de campaña y luego de postularse en dos oportunidades previas, primero el PRD en un par de ocasiones y luego con MORENA, finalmente a la tercera fue la vencida y el oriundo de Tepetitán, estado de Tabasco, por fin podrá comenzar a cumplir sus promesas electorales planteadas en su Proyecto Alternativo de Nación, México tendrá así por primera vez un gobierno de izquierda con las consecuencias que eso sin duda traerá.
Les comparto en consecuencia, estimados lectores, mi inquietud respecto a la nueva etapa que vivirá el gigante azteca, ya que dentro de las muchas cosas prometidas en campaña, el nuevo presidente mexicano trae consigo cosas como las siguientes: se presentará un plan de combate a la corrupción con lo cual, según cálculos del nuevo presidente, se podrán ahorrar alrededor de 500 mil millones de pesos tan solo en combate a la corrupción.
Además, se bajará el sueldo a la mitad de lo que percibió Enrique Peña Nieto y no gozará de ninguna otra prestación, alarmante el parecido con las promesas del fallecido Hugo Chávez, simplemente increíbles; también ha indicado que no viajará en aviones ni helicópteros privados, sino en línea comercial y por carretera; y que además el Estado Mayor dejará de formar parte de la Presidencia y se incorporará por completo a la Secretaria de la Defensa Nacional.

Estando en campaña presentó un ambicioso plan educativo, por eso, junto con su secretario de Educación Pública, el tabasqueño puede anunciar que no habrá exámenes de admisión.
En cuanto al área social, se habla de que el nuevo gobierno aumentará los programas de apoyo para adultos mayores, personas con discapacidad y otros grupos vulnerables como madres solteras y todos los estudiantes de nivel medio superior contarán con una beca mensual; la similitud con las “Misiones” del régimen Madurista son prácticamente una copia al carbón.
Más allá de la preocupación por la cercanía que puede haber con el actual desgobierno de Venezuela, se me vienen a la cabeza ciertas cosas, tales como si se rescatarán los valores y principios sociales en esa gran nación, si de verdad habrá mayor respeto a las libertades con tantos asesinatos de periodistas, realmente se garantizará el derecho a disentir, el gobierno tendrá dentro de sus prioridades el fomentar el derecho a libertad de expresión, de prensa y un largo etcétera. 
Como analista la intención no es la de atacar a nadie, mucho menos sembrar la oscuridad respecto a un gobierno que tendrá 6 años para probar e implementar sus promesas, sin embargo vale la pena dejar en el ambiente algo que señaló el presidente saliente Enrique Peña Nieto, quien dijo en una oportunidad que “para destacar en el mundo de hoy, lograr un cambio y hacer de México una nación más competitiva, se requiere más que buenos deseos”, así de simple y sencillo.

Reinaldo J. Aguilera R. @raguilera68

No hay comentarios.:

Publicar un comentario

“Genios sin Estudios e Idiotas con Doctorado”

Para el momento en que les escribo la presente columna, solo han pasado 24 horas prácticamente de que culminó el proceso electoral para reno...